El Arco de Bolnuevo
Bajo la Luna del Ciervo
Cuando el verano se instala en el hemisferio norte, una luna llena muy particular comienza a dominar el cielo. Se trata de la luna de ciervo, una denominación ancestral que ha perdurado a lo largo del tiempo.
Aunque astronómicamente no difiere de otras lunas llenas, este nombre encierra una profunda carga simbólica y natural que ha fascinado a culturas enteras.
El nombre proviene de los pueblos originarios norteamericanos, quienes observaron que durante estas semanas los ciervos machos comenzaban a desarrollar nuevas astas,
aún cubiertas por una capa aterciopelada. Este detalle, tan preciso
como simbólico, sirvió de guía para nombrar la luna llena de esa época.
Señalaba un momento crucial en la fauna, y también el inicio
de transformaciones en la vegetación, el avance de las cosechas y la
llegada del período más caluroso del año. Esta luna actuaba como un reloj natural, sincronizado con la vida que florecía bajo su luz. Aprovechando nuestra "emigración" a la costa en estas fechas y la presencia de la primera luna del verano hemos buscado un lugar especial en las montañas frente al mar, una ventana al horizonte bajo las estrellas.
Cuando el verano se instala en el hemisferio norte, una luna llena muy particular comienza a dominar el cielo. Se trata de la luna de ciervo, una denominación ancestral que ha perdurado a lo largo del tiempo.
Aunque astronómicamente no difiere de otras lunas llenas, este nombre encierra una profunda carga simbólica y natural que ha fascinado a culturas enteras.
El nombre proviene de los pueblos originarios norteamericanos, quienes observaron que durante estas semanas los ciervos machos comenzaban a desarrollar nuevas astas, aún cubiertas por una capa aterciopelada. Este detalle, tan preciso como simbólico, sirvió de guía para nombrar la luna llena de esa época.
Desde las Gredas de Bolnuevo, que acompañan al mar desde hace 4,5 millones de años subiremos en dirección hacia la Sierra de las Moreras al atardecer, volviendo nuestras cabezas para disfrutar del atardecer hasta llegar al arco de Bolnuevo, ventana anclada a la tierra frente al mar.
Despues de cenar bajo su arco tomaremos camino de vuelta tomando camino hacia la playa del Rincón y junto al mar regresar a los vehículos.
Quienes lo deseemos podremos quedarnos un rato en la playa, será necesario dejar esto claro a la hora de compartir los coches. Para esto lo más cómodo será dejar en los coches la capaza arreglá para la playa y recogerla a la vuelta de la ruta, dejar las mochilas y coger la capaza.
Atención los no federados debéis inscribiros antes del miércoles para poder tramitar las licencias para el viernes
W.P.: https://maps.app.goo.gl/ekcYGX2vUcnQVQoR6
DESPLAZAMIENTO: En
coches particulares, agrupándonos en el menor número de vehículos para
ahorrar combustible, reducir contaminación y aprovechar bien el espacio
que hay para aparcar. Compartimos los gastos con quienes aportan sus
vehículos.
EQUIPACION: Calzado cómodo de montaña preferiblemente botas, ropa adecuada a la predicción meteorológica, impermeable, agua suficiente y cena ligera, palos de senderismo o marcha nórdica muy, muy recomendables, frontal con pilas de repuesto.
Capaza para la playa, toalla, bañador... etc en caso de que se quiera quedarse un rato junto al mar
Como siempre, es recomendable llevar un botiquín personal que incluya los medicamentos necesarios de uso particular y una manta térmica.
